Restauracion del panel de azulejos «Sacrificio de Isaac» de los patios principales del Hospital de La Caridad

La primera referencia sobre los siete paneles de azulejos holandeses con escenas bíblicas, datados a finales del siglo XVII-principios del siglo XVIII, y  ubicados actualmente en los patios del Hospital de la Santa Caridad, nos la ofrece el investigador Santos Simoes (1959)[1], quien reivindicaba la importancia artística de estas composiciones, y consideraba a estos siete paneles cerámicos como uno de los mejores conjuntos conocidos de los azulejos holandeses, con un valor absoluto tan grande como los de Nazaré o Madre de Deus (en Portugal), e incluso más interesantes por ser más antiguos.

 Igualmente, su investigación, pionera sobre los azulejos holandeses en la Península Ibérica, nos permite conocer tanto su estado de conservación en 1959, como su localización  en la casa de D. José Ignacio Vázquez de Pablo (c/ Muñoz y Pabón de Sevilla), siendo traídos a esta ciudad, procedentes del demolido convento de las Descalzas de Cádiz por Virgilio Mattoni, que los instaló en su casa de la calle San Gregorio. Esta casa pasó al Marqués de Saltillo, y tras su fallecimiento, los paneles fueron comprados por D. José Ignacio Vázquez de Pablo, quien los donó a la Hermandad de la Santa Caridad, donde se instalan a principios de la década de 1960[2].

 Tras una primera inspección visual se constató la necesidad de una Intervención de emergencia en el panel cerámico  “El sacrificio de Isaac”, ubicado en el primer patio del Hospital de la Santa Caridad en Sevilla.

 El deterioro y el peligro para conservar la integridad de la obra era manifiesto. Por efecto del envejecimiento de los morteros de sujeción, parte del paño, en total  dieciséis azulejos sufrieron recientemente un desplome y consecuente fractura al  impactar contra  el suelo. Todos los fragmentos fueron recuperados y se ha procedido a su recomposición por el equipo de conservadores-restauradores.

 Finalmente, tras la actuación en la estructura muraria y en los alfeizares de las ventanas próximas; culminó el tratamiento de conservación-restauración de los azulejos. Todos los elementos cerámicos han sido repuestos a su ubicación original, sobre una cámara ventilada construida al efecto y empleándose mortero de cal tradicional. A la par se realizó un estudio en profundidad para la identificación de la obra y de su contexto en el inmueble.

Equipo responsable:

 La intervención de emergencia se ha realizado por María Jesús Reina Morales, Licenciada en Bellas Artes (Conservación-Restauración); y Sebastián Romero Coronel, Técnico Superior de Cerámica Artística, bajo la dirección técnica de Juan José Lupión Álvarez, doctorando en Bellas Artes especialista en Conservación-Restauración.